Actualmente debido a la situación que nos atraviesa como sociedad, en la cual se nos invita a quedarnos en casa durante un lapso prolongado de tiempo por la propagación del COVID-19, las empresas requieren tomar medidas para cuidar la salud de sus colaboradores, y a su vez continuar con la actividad productiva.
Es por ello que hoy en día, es necesario hacer uso de una de las modalidades de trabajo que han existido desde tiempo atrás, pero de la que poco hemos hecho uso.
Dicha forma de trabajo es el Home Office, el cual se define en la Ley Federal del Trabajo en el artículo 311 como: “Trabajo a domicilio es el que se ejecuta habitualmente para un patrón, en el domicilio del trabajador o en un local libremente elegido por él, sin vigilancia ni dirección inmediata de quien proporciona el trabajo”.
De acuerdo con los estudios realizados por Villavicencio E., (2020), cerca de mil empresas que fueron analizadas, sólo 2 de cada 10 han adoptado esta modalidad, la mayoría son instituciones transnacionales que lo han implementado paulatinamente con buenos resultados.
Estamos conscientes de que no es una gran cifra, pero es el comienzo de algo que causara un efecto positivo tanto para las empresas como para sus colaboradores.
¿Cómo realizar un Home Office efectivo?
Lo más importante es ser consciente de que no son días de descanso y debemos asumir la responsabilidad de continuar con nuestra rutina, pero desde la comodidad de nuestro hogar, por ello es necesario que adquiramos nuevos hábitos los cuales te compartiremos a continuación:
Báñate y vístete.
Evita trabajar en pijama, ya que esto puede ocasionar que te sientas tentado a recostarte de nuevo y retrasar tu agenda. Tomar un baño y cambiarte te permitirá mantenerte más activo.
Busca una posición cómoda.
Minimiza distracciones.
Evita tener encendido el televisor o algún otro medio de entretenimiento cerca.
Establece pequeñas normas con tu familia.
Hazle saber a tus familiares que no estas disponible:
Aclara tu horario de trabajo
Tu trabajo desde casa es igual de importante que el que realizas desde la oficina.
Establece horarios
Respeta una rutina profesional y hora de comida
Haz un espacio en tu casa, invierte en un lugar fijo y equipado de trabajo con todo lo que necesitas en el día.
Finaliza tu día laboral: tan necesaria es la disciplina para empezar tu día de trabajo, así como lo es para terminarlo.
Beneficios de realizar Home Office, una posibilidad de ganar-ganar:
Como colaborador:
Incremento en la calidad de vida
Mejoras tu salud física y mental
Ahorro en el transporte de tu casa al trabajo
Ahorro en estacionamiento y alimentos
Evitas gastos hormiga
Ahorro en el tiempo de traslado y evitas el tráfico
Mayor productividad en tu día laboral
Evitas distracciones
Disminuyes los niveles de estrés
Ayudas al medio ambiente
Aumento de la responsabilidad individual
Aprovechas al máximo la tecnología
Horario flexible y adecuado a nuestro ritmo
Como empresa:
Ahorro en los costos de la oficina
Contratas a los mejores colaboradores
Ayudas al medio ambiente
Aprovechas al máximo la tecnología
Creas lealtad con tus colaboradores
Reduces bajas y ausentismo
Facilitas la valoración del trabajo
Después de haber leído los puntos anteriores seguro te preguntaras el por qué la gran mayoría de las empresas no asume aún esta forma de trabajo y sólo 2 de cada 10 han aceptado este reto. La realidad es que estamos tan acostumbrados a laborar de manera presencial que al hablar de Home Office ocurre lo siguiente:
Miedo al cambio: Estamos acostumbrados a tener todo bajo control y por eso creemos que tenemos que tener a nuestra gente a un lado viendo cómo hacen las cosas.
Falta de confianza: No creemos que nuestro colaboradores logren hacer el trabajo por si solos sin necesidad de tener a alguien que los esté motivando.
Que no se tomen el trabajo en serio: El miedo más grande es que las personas no tomen su teletrabajo en serio y no lo realicen de manera efectiva.
Que no sepan balancear entre lo personal y lo laboral: La mayoría de las personas creen que hacer home office es poder estar haciendo cualquier cosa menos trabajar.
Sin embargo, la realidad es que actualmente contamos con diversas herramientas que nos permitirán medir la productividad de nuestros colaboradores, logrando el cumplimiento de objetivos y lo más importante cuidado la salud de estos.
Hernández (2020), sugiere que algunas de las herramientas que podemos usar son:
Establecer indicadores clave para la colaboración
Trabajar bajo metas individuales y grupales que sean medibles y visibles para todos los miembros del equipo.
Recomendación: OKRs (Objectives and Key Results) es una metodología creada por el exCEO de Inter.
Tecnología a tu favor, trabajo en línea
El uso de la nube no sólo sirve para tener canales de comunicación abiertos constantes, sino también para optimizar con herramientas de productividad albergadas ahí. Estas herramientas que se integran con calendario, correo electrónico y otras.
Recomendación: herramientas como Asana, Slack, Google Docs, Monday, Jira y Office 365, entre otras.
Espacio de trabajo adecuado
Incentivar a los colaboradores a diseñar y crear un espacio de trabajo adecuado en sus hogares, pues tener un espacio ergonómico, limpio, ordenado y cómodo permitirá que se sienta como en la oficina mientras la pandemia se controla.
Tomar pausas activas
Descansar durante el día sirve para recuperar energía y mejorar nuestro desempeño, pues laborar desde casa puede hacer que se pierda la línea entre hogar y trabajo. Esto servirá para prevenir enfermedades causadas por trabajos que no implican mucho movimiento.
Sobrecomunicación
Uno de los más grandes retos del trabajo remoto es conectarse con los compañeros de trabajo. Por ello, es fundamental estar constantemente comunicado al resto del equipo en que se está trabajando y coordinarse. Es muy recomendable sustituir llamadas por videollamadas.
Recomendación: Zoom, Slack, Skype empresarial, Hangouts, Meet y GoToMeeting.
“Los logros de una organización son los resultados del esfuerzo combinado de cada individuo”.
Vince Lombardi